En cualquiera de estas modalidades el ciclismo tiene incontables beneficios. Al andar en bicicleta, oxigenas tu cerebro y aumentas tu autoestima con la producción de hormonas como la dopamina, serotonina y endorfina. Es la forma ideal para alejar el estrés de nuestras vidas. Además, este deporte estabiliza el ritmo biológico del cuerpo y reduce los niveles de cortisol, una hormona relacionada con el estrés que impide el sueño profundo.
Es un entrenamiento completo, tanto para quienes sólo practican ciclismo, como para aquellos que lo complementan con otra actividad como el running. Cuando pedaleamos la mayor parte del peso recae sobre el asiento, lo que provoca la ausencia de impacto articular. Por eso aquellos deportistas que están atravesando una lesión, pueden mantener su estado físico al andar en bicicleta. También teniendo en cuenta que esta disciplina beneficia la tonificación muscular.
El pedaleo provoca una acción de masaje sobre nuestra piel, moviliza activamente el agua y las toxinas del organismo e impide la acumulación de grasas al quemarlas para producir energía. Por otro lado, el movimiento cíclico del pedaleo también favorece la difusión de las sustancias nutritivas por los cartílagos. Esto nos permite tener articulaciones más sanas, resistentes y protegidas.
Los músculos que más se benefician con esta disciplina son los cuádriceps, isquiotibiales, gemelos y el glúteo mayor, ya que son los que más trabajan cuando pedaleamos. También fortalece la espalda, la posición inclinada del cuerpo hacia el manillar estimula los pequeños músculos de las vértebras dorsales y fortalece la zona lumbar. De esta manera, estabiliza el tronco y protege la columna vertebral de vibraciones y golpes. Es decir, de forma indirecta reduce los dolores de espalda generados por el sedentarismo, así como la posibilidad de aparición de hernias discales. Para que esto ocurra, es indispensable asegurarnos de mantener una posición correcta en la bicicleta en todo momento.
Además, practicar esta actividad te permitirá ser más eficiente en cualquier otra actividad cotidiana que tengas durante el día, ya que fortalecerás el sistema circulatorio, el corazón y conseguirás que descienda la frecuencia cardíaca en reposo.
El ciclismo te brindará además de un buen estado de salud, uno de los medios de transporte más ecológicos que puedes utilizar.